Serra de Espadá (Almedíjar, Alcudia de Veo). |
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La
preciosa sierra de Espadán en la que ya fijaron sus miradas los moriscos
será objeto de nuestra siguiente aventura, teniendo el punto de partida en
Almedíjar uno de tantos pequeñitos pueblos que aun sobrevive en estas
tierras a base de la industrias del corcho, del embotellamiento del agua y
su preciada miel como bien reza a la entrada en un gran mural del vecino
pueblo de Eslida.
Callejeando por las estrechas calles de Almedíjar
pasaremos
por el lado de la iglesia y el ayuntamiento para salir del pueblo por el
lado de una gran balsa.
El camino asfaltado nos llevara por el lado del río hasta llegar a un
antiguo molino donde haremos una parada para observar el reciente arreglo
que le han dado quedando totalmente restaurado.
Retomando el camino continuaremos hasta pasar por el lado de una carbonera
donde empezaremos a ascender llegando al final del camino.
En este tramo cerrado de vegetación cogeremos un sendero que nos llevara
entretenidos observando los impresionantes alcornoques que nos encontramos
al paso.
Con la continua vista del agua observaremos como neutro caminar discurre por
un buen sendero que ya utilizaban los moriscos para la extracción del corcho
de esta sierra.
Con alguna que otra parada para alzar la vista y ver la exuberante
vegetación llegaremos a un camino ancho donde giraremos a la derecha y
continuaremos subiendo hasta la carretera que viene de Almedíjar donde
haremos una parada para divisar las estupendas vistas.
Llegado
este punto de la ruta emplearemos un sendero que veremos en la parte
izquierda de la carretera y que nos llevara remontando unos metros a un
antiguo aljibe repletito de agua.
El sendero nos llevara a pasar por un pedregal el cual pasaremos con cuidado
observando al cabo de pocos metros una derruida caseta de vigilancia.
Tapados por la vegetación saldremos a un claro donde el sendero se empinará
fuertemente siendo así hasta la cima de 1083 metros donde haremos una parada
para observar todo lo que nos rodea.
Con la grata satisfacción de haber subido a la cima de Espadán decidiremos
volver por un sendero el cual se nos hace un poco malo en los primeros
metros siendo así mas agradable en la parte final.
Con la mirada de los grandes pinos y acobijados por su sombra descenderemos
encontrándonos al paso alguna que otra caseta de vigilancia de la guerra de
la cual solo quedan algunos muros en pie.
Pasando otro pedregal llegaremos a otra zona donde
todavía
se siguen explotando los alcornocales observando como se quedan desnudos al
aire siendo utilizada luego su piel para los tapones de esos vinos que tanto
nos gusta paladear en nuestro almuerzo.
Estando casi al final de la ruta solo nos quedara salir hasta la carretera
para finalmente descender por un camino asfaltado que vemos a la izquierda a
l pueblo de Alcudia de Veo.
A la vuelta como teníamos reservada la comida en el vecino pueblo de Eslida
hacia donde nos dirigimos a degustar un buen plato de Olleta de Eslida dando
así después de esta comilona la marcha por terminada.